domingo, 24 de febrero de 2008

Midori: La niña de las camelias

Director: Hiroshi Harada
Año: 1992
País: Japón

El comienzo: Maruo y su arte/manga estilo muzane: carácter bizarro de violencia y sexo.

La adaptación: Hiroshi Harada se lleva más de un par de pares de años editando el anime de un manga de Maruo, se dice encargándose el mismo del dibujo, color, música, edición, todo. El resultado a primera instancia es un producto morboso que no tiene cabida a ser proyectado en algún sitio, tiempo después en algunos lugares se convierte en una pequeña pieza “de culto”, querida y respetada.

De que va: una historia de de tragedia, amor, horror, felicidad y tristeza, donde la protagonista es una chiquilla de unos 11-12 años. En principio, con una madre enferma y sin un padre que cumpla sus funciones Midori se dedica a vender flores en lugares de mala muerte hasta que por el fallecimiento de su madre acepta la oferta de un “amable” hombre que se ofrece pagarle la escuela y poner a su disposición lo que ella necesite. A partir de aquí conoce el engaño, la desilusión, y se ve entre un grupo de “fenómenos” de un espectáculo ambulante, como un circo.

Lo que continúa son momentos de inocencia pulverizada, consecuentes humillaciones, violaciones y maltratos mentales, la resignación, tolerancia y aceptación, el amor, protección, frustración y tristeza.

Más allá de la humildad estética de la película, de los actos inmorales y de perversión cada uno de los cantos en los que está dividida resultan muy entretenidos, donde tal vez sin buscar más significados o inventarnos un “lo que quiere decir el autor” la degustamos como lo que es, una historia un tanto alternativa que si bien explota el morbo no es una trama vacía.

Algunas imágenes que encontré por ahí, si quieren no lean la descripción:










1.- Cuando le cuenta sus alegrías a su madre, al notar que no responde la descubre y ve que está muerta de hace unos días y devorada por las ratas.

2.- Una mujer que usualmente se le ve cargando serpientes y un sujeto sin brazos, siempre vendado (creo estaba quemado). Parte del equipo.

3.- Integrante del equipo, Midori era obligada a darle su baño.

4.- Uno de los cachorros que Midori estimaba y alimentaba a escondidas… así terminaron y después pararon a la cacerola.

5.- El enano mago que llega por la noche.