Director: Fabrice Du Welz
Guionista: Fabrice Du Welz y Vincent Tavier
País: Bélgica
Año: 2014
Duración: 93 min. aprox.
Género / Tópico: Thriller - Romance - Drama / Asesinos en serie - Basado en hechos reales
Sinopsis: Gloria viene de sufrir a un marido celoso. Michel se aprovecha de las mujeres para conseguir dinero. Los dos se encuentran, se acuestan y ella se enamora perdidamente. Gloria decide ayudar a Michel con sus estafas, pero, cuando los celos afloren, Gloria se verá abocada a la violencia.
Reparto / Personajes
Lola Dueñas es Gloria
Laurent Lucas es Michel Bellmer
Héléna Noguerra es Solange
Stéphane Bissot es Madeleine
Entre otros
No sin cierta causticidad recordé una estrofa del tema Amores que Matan de Joaquín Sabina: "Y morirme contigo si te matas, y matarme contigo si te mueres. Porque el amor cuando no muere mata, porque amores que matan nunca mueren…" Esto en referencia a la intensidad de los amantes, sin duda algo increíble, experimentado por pocos y hermoso, a “excepción” de cuando es acompañado de la exacerbación emocional que orquesta a los crímenes pasionales, capaz de obnubilar la razón, y no sólo ser un hecho esporádico sino vicioso. ¿Qué es amor, qué ya no es amor? Imposible de definir, no es un sentimiento universal, ¿y por qué no?, los psicópatas y cualquier enfermo mental también tiene derecho de llamar a su obsesión: amor.
¿Cómo dice el refrán? Siempre hay un roto para un desconocido, ¿no? Y exactamente eso es (o al menos por el bien de nuestra salud mental es lo que la mayoría queremos pensar), sin importa cuán extraño se sea, se espera haya alguien apropiado a nuestras particularidades. La solead pesa tanto para muchos.
Entre 1947 y 1949 Raymond Fernández y Martha Beck encontraron en su vida el consuelo de una desequilibra comunión, cúspide de un obsesión y enfermizo amor que dejó tras sí una veintena de asesinatos. Raymond, un hombre cualquiera con una vida un tanto difícil pero tolerable, hasta el día en que accidentalmente sufrió una fractura de cráneo produciéndole anomalías en la corteza cerebral que desatarían su sociopatía, adicto al sexo y con una fuerte y recién creencia en el vudú, abandonó a su familia para dedicarse a estafar y engañar a mujeres solitarias con baja autoestima, una de ellas Martha. Martha, una mujer insegura con una enfermedad hormonal que le produjo obesidad, sumamente promiscua y paradójicamente romántica, en su mitomanía sólo existían fantasías rosas de amor, soñaba con un príncipe. Juntos, un par de corazones solitarios que por alguna extraña razón encontraron uno en el otro la expresión más allá del bien y del mal de lo que es el amor, ajeno a las leyes de la sociedad. Martha se convirtió en la amante y cómplice de Raymond, casi ideal, si no fuese por sus arranques de celos e irá, y en consecuencia, una círculo vicioso de asesinatos. Complementos. Es curioso el perfil de esta pareja, Martha insegura e ingenua era la dominante en la relación y de quien fluía la violencia, por su parte Raymond, seductor y “siempre” en control era el elemento pasivo.
Fabrice Du Welz director de Calvaire luego de seis años de ausencia vuelve en el 2014 con dos filmes, Colt 45 y Alleluia, siendo esta última una adaptación libre de la vida de Raymond y Martha, los asesinos de los corazones solitarios. Cuarta adaptación, en 1969 Kastle dirigió The Honeymoon Killers, en 1996 el director mexicano Ripstein dirige Profundo Carmesí y en el 2006 está Lonely Hearts de Robinson, la más floja. Si bien Alleluia es una más, el filme de Fabrice, aunque un poco desarticulado, consigue un enfoque propio acerca de esta pareja de asesinos, sin un prólogo muy extenso pasa rápidamente al meollo del asunto: la disfuncionalidad emocional de los protagonistas. Dividida en cuatro capítulos narra el descubrimiento, la pasión y el clímax de su faceta como asesinos, con musicalidad, cinismo, y aisladas dosis de dulzura y humor transcurre casi de forma epistolar.
Una película rodada en 16 mm cuyos únicos personajes, prácticamente son Laurent Lucas (también protagonista en Calvaire) como Michel y Lola Dueña como Gloria, siendo ella la más impetuosa y pieza clave en la credibilidad del rol de ambos. El resto de personajes: meros accesorios sin relevancia. Punto a favor la fotografía de Manuel Dacosse y la atmósfera atemporal que logra imprimir. Por desgracia el final de Alleluia no es el mejor pero… así pasa a veces.
Alleluia es la historia de un retorcido amor, flagrantemente crudo. De bipolaridad dramática, y, sin ser un filme estupendo sí es una perspectiva poco convencional en comparación de los títulos que le anteceden.
Frases
Hasta que la muerte nos separe
Si no ayudas a la gente que amas es que realmente no la amas
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