Director: Srdjan Spasojevic
País: Serbia
Año: 2010
Duración: 102 min. aprox.
Trailer
Humm… estamos ante un thriller de acción donde la violencia y el sexo son el vehículo para culminar en un drama efectista. Así de sencillo. Sinceramente no le veo más fin que el de entretener. Fácil de entender, no hay mucho en realidad, y difícil de ver si son quisquillosos y moralistas.
Mediante una fina fotografía de aspecto ligeramente ocre, muy pulcro y liso, y una narrativa lineal hasta casi la hora, conocemos un drama familiar que queda en segundo plano, tras el protagonismo del empleo del papá. Un veterano del porno, experto en humillar a las mujeres y dejarlas siempre deseosas de más, amoroso padre y esposo, buen hermano, un ciudadano común en una Serbia muy limpia también, da la impresión, la ciudad, de una especie de videoclip surrealista: por la fotografía y lo desiertas que lucen las calles, y a la hora que aparecen personajes andando por ahí, la forma en que son iluminados. Este viejo actor porno se llama Milos y es un parásito que empieza a temer a las futuras complicaciones financieras que ya ve venir, pues el dinero que le dejó la “actuada” se le acaba. Es cuando le cae de maravilla un trabajo, una paga increíble y un misterioso guión proveniente de un más misterioso director de cine.
Este “genio” del cine, Vukmir, hace un porno muy experimental, minimalista y original. Algo que mantiene a Milos todo el tiempo nervioso ya qué no sabe exactamente de qué va la película. Y es más que obvio que Milos desconfíe y que nosotros sepamos por adelantado de lo que se trata, de hecho, nada más estamos esperando a que empiece la acción. Vukmir no filma por filmar, sino de dónde sacaría la suma para financiar sus películas. Vukmir obedece a los interéses de gente poderosa, que está oculta, esa gente millonaria y depravada que nos ilustran en películas como 8 mm. y Cigarette burns. Así es como, en parte, debido a su propia ingenuidad, Milos cae a los servicios de esta perversa sociedad, que no es otra cosa que torbellino asfixiante de drogas, asesinatos, misoginia y las cuestionables escenas de pedofilia.
Aquí no vamos a tener un trasfondo social o político, una crítica, una reflexión. Nada de eso, y de Serbia sólo el título porque no hay más, es sólo violencia y polémica justificable en la exposición de la victimización. Su ficticio argumento no retrata en lo absoluto la degradación humana, su descomposición: los que están podridos ya están podridos y punto. Lo único que hace es retratar el interés por satisfacer la morbosidad del hombre, en palabras de Vukmir: La víctima es la venta más orgullosa del mundo.
Un drama muy cruel con una producción de gran calidad: escenarios, fotografía, montaje, música, la publicidad, el mismo tráiler (todo lo opuesto a The life and death of a porno gang… ash, ojalá tuviese un nombre más corto), y sin embargo, con algunos baches en su desarrollo, por ejemplo: Lo mal dibujados que están algunos personajes importantes: la incondicional esposa y el depravado y envidioso hermano, lo trillados que resultan otros: el equipo que ayuda al rodaje, el tipo pelón de lentes, el director loco y su Bravo, bravo. También las imágenes de los videos porno que pasan, tan falsas… todos los que hayan visto porno se darán cuenta, y no lo entiendo, a ver, si ya metieron unas imágenes “fuertes” de pedofilia que les cuesta meter porno real ¿?, en una porno de verdad no hay tantas tomas al rostro del hombre, es lo de menos, y mucho menos close-up artísticos a los pies (a menos que sea fetichista).
En fin, y a pesar de que el final excesivamente dramático no me agradó del todo y mucho menos el epilogo (cómo lo detesté), puedo decir que la película en general me gustó. Sí, me agradó mucho. Pero es porque a mí, claro, entre otras tantas cosas, me van estos temas polémicos y de moralidad cuestionable.
Mediante una fina fotografía de aspecto ligeramente ocre, muy pulcro y liso, y una narrativa lineal hasta casi la hora, conocemos un drama familiar que queda en segundo plano, tras el protagonismo del empleo del papá. Un veterano del porno, experto en humillar a las mujeres y dejarlas siempre deseosas de más, amoroso padre y esposo, buen hermano, un ciudadano común en una Serbia muy limpia también, da la impresión, la ciudad, de una especie de videoclip surrealista: por la fotografía y lo desiertas que lucen las calles, y a la hora que aparecen personajes andando por ahí, la forma en que son iluminados. Este viejo actor porno se llama Milos y es un parásito que empieza a temer a las futuras complicaciones financieras que ya ve venir, pues el dinero que le dejó la “actuada” se le acaba. Es cuando le cae de maravilla un trabajo, una paga increíble y un misterioso guión proveniente de un más misterioso director de cine.
Este “genio” del cine, Vukmir, hace un porno muy experimental, minimalista y original. Algo que mantiene a Milos todo el tiempo nervioso ya qué no sabe exactamente de qué va la película. Y es más que obvio que Milos desconfíe y que nosotros sepamos por adelantado de lo que se trata, de hecho, nada más estamos esperando a que empiece la acción. Vukmir no filma por filmar, sino de dónde sacaría la suma para financiar sus películas. Vukmir obedece a los interéses de gente poderosa, que está oculta, esa gente millonaria y depravada que nos ilustran en películas como 8 mm. y Cigarette burns. Así es como, en parte, debido a su propia ingenuidad, Milos cae a los servicios de esta perversa sociedad, que no es otra cosa que torbellino asfixiante de drogas, asesinatos, misoginia y las cuestionables escenas de pedofilia.
Aquí no vamos a tener un trasfondo social o político, una crítica, una reflexión. Nada de eso, y de Serbia sólo el título porque no hay más, es sólo violencia y polémica justificable en la exposición de la victimización. Su ficticio argumento no retrata en lo absoluto la degradación humana, su descomposición: los que están podridos ya están podridos y punto. Lo único que hace es retratar el interés por satisfacer la morbosidad del hombre, en palabras de Vukmir: La víctima es la venta más orgullosa del mundo.
Un drama muy cruel con una producción de gran calidad: escenarios, fotografía, montaje, música, la publicidad, el mismo tráiler (todo lo opuesto a The life and death of a porno gang… ash, ojalá tuviese un nombre más corto), y sin embargo, con algunos baches en su desarrollo, por ejemplo: Lo mal dibujados que están algunos personajes importantes: la incondicional esposa y el depravado y envidioso hermano, lo trillados que resultan otros: el equipo que ayuda al rodaje, el tipo pelón de lentes, el director loco y su Bravo, bravo. También las imágenes de los videos porno que pasan, tan falsas… todos los que hayan visto porno se darán cuenta, y no lo entiendo, a ver, si ya metieron unas imágenes “fuertes” de pedofilia que les cuesta meter porno real ¿?, en una porno de verdad no hay tantas tomas al rostro del hombre, es lo de menos, y mucho menos close-up artísticos a los pies (a menos que sea fetichista).
En fin, y a pesar de que el final excesivamente dramático no me agradó del todo y mucho menos el epilogo (cómo lo detesté), puedo decir que la película en general me gustó. Sí, me agradó mucho. Pero es porque a mí, claro, entre otras tantas cosas, me van estos temas polémicos y de moralidad cuestionable.
¿De dónde la pueden descargar? No sé, debe de haber muchos enlaces en la red. El que NO les recomiendo es éste, la imagen no es buena, aparece dos veces una marca de agua tremenda, y tiene un par de zonas borrosas todo el metraje.
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