sábado, 7 de mayo de 2011

Porque hay cosas que nunca se olvidan


Director: Lucas Figueroa
País: España/Italia
Año: 2009
Duración: 13 min. aprox.


Cortometraje dirigido por un argentino, producido con dinero español y rodado en Italia. Famoso por el epíteto que hace tiempo esgrime y por el cual se ha hecho famoso (y causado algunos malestares): el cortometraje más premiado. 300 premios que si bien no son un Oscar o el Goya (infinidad de pequeños y no tan pequeños festivales) le hacen ser incluido en el libro de los Records Guinness.

Y bien… sin que si quiera sugiera que no es bueno (no está mal) también comento que está demás sabido que no siempre los ganadores, el ganador, es el mejor.

¿De qué va? A través de una fotografía ocre que ayuda a crear esa atmósfera de época, la historia se ambienta en un pueblo de Nápoles en los años 50, y tiene la característica de ser “circular”: empezamos en una prisión, el presente, y de ahí vamos al pasado donde conoceremos lo que nos incumbe, flashbacks , y retornamos al tiempo inicial.
Lo que nos incumbe… de lo que trata. Comedia negra futbolera que nos retrata una satisfacción, el cobró de una venganza, dura pero justa, de una pequeña pandilla de niños sobre la anciana amargada del barrio. Cotidianidad y humor negro.


1 comentario:

Ricardo Bautista dijo...

ni los mejores vicios satisfacen mas que una venganza.